sábado, 16 de marzo de 2013

AL FINAL NOS EXAMINARÁN DEL AMOR


EUCARISTÍA DEL DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

CUARTO DOMINGO DE CUARESMA



MONICIÓN DE ENTRADA


¡Atención hermanas y hermanos! Estamos terminando la Cuaresma. No son estos unos días para cumplir unos ritos, ni para hacer determinados sacrificios, ni para estar tristes. ¡Cuaresma es el anuncio de una fiesta, el anuncio de la Pascua! Es el camino hacia un nuevo amanecer, una posibilidad, un futuro que está en nuestras manos lleno de amor y de justicia. Estemos alegres en este camino y tengamos el corazón bien abierto, porque al final nos examinarán del amor.



PERDÓN


Canto: En mi debilidad me haces fuerte…

Con frecuencia estamos tan preocupados por todo, tan agobiados, que olvidamos que cada día que amanece nos regala un mundo lleno de posibilidades por construir y de oportunidades para amar.

A veces nos sentimos solos e impotentes ante las dificultades y no somos conscientes de que Dios nos ama y de que la Vida de Jesús es esperanza para el mundo.

Nos ponemos demasiadas barreras y normas, en ocasiones fruto de nuestros propios miedos y debilidades. Esto nos lleva a juzgar y a decidir por los demás lo que está bien y lo que está mal en lugar de mirar al corazón de las personas.

Canto: En mi debilidad me haces fuerte…

 

MONICIÓN A LAS LECTURAS


En la Palabra de hoy, Isaías nos abre los ojos hacia un camino de esperanza, un camino que para nosotros es hacia la Pascua. Nos invita a dejar de lado aquello que nos aprisiona y mirar hacia adelante, porque ¡Algo nuevo está brotando!

San Pablo, en su carta a los Filipenses insiste en lo mismo: seguir hacia adelante y no mirar atrás porque Jesucristo resucitado es nuestra meta.

En el Evangelio de Juan, Jesús nos enseña a descubrir dónde se encuentra lo realmente importante, lo esencial: No en la ley, sino en el corazón de las personas. Nos invita a tomar conciencia de nuestras limitaciones y nos muestra la misericordia y el amor de Dios.

 

HOMILÍA


-Teníamos ganas de encontrarnos de nuevo con vosotros. Y es que, después de estas tres semanas, todavía no nos queda muy claro de qué va esto de la Cuaresma.

-En los domingos anteriores nos han explicado que la Cuaresma no solo es un tiempo para hacer determinados ritos, sacrificios y compromisos.

-Muchos de nosotros, sobre todo los más jóvenes, no entendemos bien el rito de la ceniza, ni por qué se reza el viacrucis, ni por qué los viernes no se puede comer carne… y las procesiones nos aburren.

-Sabemos que tenemos que ser mejores. ¿Pero no tenemos que serlo todos los días del año? ¿O es que estos días tenemos que ser aún más buenos?

-Es verdad que cada día del año debemos trabajar por ser mejores personas. Pero también es verdad que todos los días deberíamos agradecer y celebrar el regalo de la vida, aunque es algo que se nos olvida. Sin embargo, todos los años celebramos nuestro cumpleaños, e incluso durante varios días: un día con los padres, otro con los amigos, con la familia… ¿o no?

-Sí, nuestro cumple es un día muy especial que nos recuerda que seguimos vivos, y también nos hace sentir muy agradecidos no solo por los regalos sino porque sabemos que hay muchas personas que nos quieren.

-Pues de la misma manera, también necesitamos vivir unos días como la Cuaresma, más especiales, para recordarnos ciertas cosas que con frecuencia se nos olvidan.

-Y ¿qué cosas son esas?

-¡Uf! La lista sería interminable. Y aunque todas se pueden resumir en una sola, vamos a recordar algunas de ellas.

“En estos días queremos recordar:
-que un abrazo y una sonrisa son capaces de cambiar nuestro corazón y el corazón de aquellos que nos rodean.
-que escuchar con respeto y comprender al otro es fraternidad.
-que consumir solo lo que necesitamos es solidaridad.
-que dedicar nuestro tiempo al que lo necesita nos hace a todos más personas.
-que acompañar en el dolor al que sufre es dar vida.
-que buscar la relación con Dios, tanto de forma individual como comunitaria, nos recuerda que no estamos solos y que todos somos sus hijos queridos.
-que denunciar las injusticias nos hace más justos.
-que ser sinceros nos ayuda a construir la verdad.
-que alegrarnos de las buenas noticias nuestras y de los demás nos hace más felices.
-que trabajar con responsabilidad nos ayuda a construir un mundo mejor.
-que ser sencillos y humildes nos ayuda a vivir en igualdad
-que ser pacíficos ayuda a construir la paz.
-que no juzgar ni condenar a nadie ayuda a construir la libertad.
-que reconocer nuestras debilidades nos ayuda a comprender y respetar las de los demás.
-que amar sin límites merece la pena porque al final…me examinarán del Amor y AMAR SIGNIFICA RESUCITAR.

 

PETICIONES


1.-Te pedimos Señor que el nuevo papa Francisco sepa hacer honor a su nombre sirviendo con sencillez a la Iglesia, trabajando por la justicia y la libertad de los pueblos, luchando contra la pobreza, y teniendo en cuenta las necesidades de nuestro mundo del siglo XXI. Te lo pedimos, Señor.

2.-Te pedimos Señor que vivamos estos días que quedan de Cuaresma como un verdadero anuncio de la Pascua, como un camino de esperanza para todos, trabajando con alegría en la construcción de un mundo mejor. Te lo pedimos, Señor.

3.-Te pedimos Señor que nos ayudes a mirar al corazón de las personas, sin juzgar ni condenar, sabiendo que solo el amor nos hará más libres y felices. Te lo pedimos, Señor.

4.-Te pedimos Señor por todas las personas que en nuestro mundo lo están pasando mal: las víctimas de cualquier tipo de violencia, los que sufren la crisis de una forma brutal, los enfermos, los que se encuentran solos y los que no encuentran sentido a sus vidas. Que seamos portadores de luz y esperanza en sus vidas. Te lo pedimos, Señor.

5.- Te pedimos Señor que sepamos transmitir con nuestro ejemplo a los niños y jóvenes de nuestro barrio la necesidad de transformar las estructuras sociales en las que estamos inmersos para construir un mundo más igualitario y justo para todos. Te lo pedimos, Señor.

OFRENDAS


Te ofrecemos, Señor, estas piedras. Son un signo de que no queremos crucificar a nadie. Te las entregamos porque queremos rechazar cualquier tipo de violencia, juicio o condena, y poner por encima de las leyes el corazón de las personas.

Te ofrecemos, Señor, esta planta que está brotando. Es un signo de esperanza, de que un mundo resucitado merece la pena. Depende de cada uno de nosotros hacerlo posible.

Te ofrecemos, Señor, el pan y el vino. Que sean nuestro alimento y nuestra fuerza para no desfallecer ante el cansancio y las dificultades.


GESTO DE LA PAZ

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario