UN REY DIFERENTE, UN REINO PARA TODOS

EUCARISTÍA DEL DOMINGO 22/11/2015. CRISTO REY 2015

MONICIÓN DE ENTRADA

- Había una vez un rey que no nació en un lujoso palacio lleno de criados. Un rey que ni siquiera nació en una casa calentita, sino que nació en un establo de animales, sucio y frío.

- Había una vez un rey que no llevaba corona de oro ni de piedras preciosas. Aunque una vez le colocaron en la cabeza una corona hecha con ramas llenas de espinas.

- Había una vez un rey que no tenía ropas lujosas. Un rey que solo tenía una túnica para poderse vestir.

- Había una vez un rey que no tenía criados ni sirvientes. Un rey que solo quería servir a todos.

- Había una vez un rey que no tenía un ejército para protegerle, ni para luchar en las guerras. Un rey que tenía amigos y que iba por todos los caminos, aldeas y ciudades dando la paz.

- Había una vez un rey que no tenía el poder que dan las riquezas, ni siquiera estaba entre las personas importantes. Un rey cuyo único poder era el amor y, para él, los más importantes eran los más pobres y desfavorecidos.

Un rey algo especial, ¿no?. Y bien diferente de los reyes y poderosos que todos conocemos.

Los niños, ¿sabéis quién es este rey? ¿le conocéis?

¿Sois sus amigos? ¿Os gusta lo que hace y lo que dice? ¿Creéis que es importante vivir así?

Pues los adultos parece que no nos enteramos mucho.

Hoy, fiesta de Cristo Rey, vamos a escuchar la palabra de Dios y vamos a escuchar a los niños; cómo ellos entienden el Reino, cómo es el mundo que sueñan.

PERDÓN

-Cuando nos tratan mal, cuando nos insultan, cuando vemos violencia a nuestro alrededor, solemos responder también con odio y violencia. Jesús, perdónanos.

-Cuando tenemos al lado a alguien diferente a nosotros y que no piensa igual, muchas veces le despreciamos y nos sentimos superiores. Jesús, perdónanos.

-Cuando nos enfadamos porque no nos compran lo que queremos, cuando ponemos mala cara por tener que estudiar, no nos damos cuenta de que hay millones de niños que ni siquiera pueden alimentarse ni tampoco podrán ir a la escuela. Jesús, perdónanos.

- Jesús, perdona también a todas las personas adultas, porque muchos dicen creer en Dios pero siguen sin enterarse de que lo único importante para Dios es el amor. Jesús, perdónanos.

HOMILÍA

El Reino de Jesús es bastante desconcertante. Un reino totalmente humano, que solo ofrece la paz y el amor. Y sin embargo un reino que no es de este mundo, tal y como dice el propio Jesús y como podemos constatar nosotros. Con las noticias de cada día parece que aquí en la tierra no haya lugar para un reino de Paz ni de Amor. Parece imposible concebir un Reino que no se imponga por la fuerza ni que se defienda con ella; un Reino sin lujos ni riquezas; sin un ejército que lo proteja.

Entre los favoritos de Jesús están los niños. Por eso, hoy queremos que sean ellos los que nos abran los ojos, los que nos ayuden a ver cómo entienden el Reino de Jesús y cómo es el mundo que desean.

A todos los niños se os ha entregado una pegatina. En ella vais a escribir en una palabra o una frase, el que no sepa escribir puede dibujar, cómo es el mundo que os gustaría tener. Después lo pegaremos en ese cartel y leeremos algunas de las cosas que habéis puesto. Esto es muy importante para nosotros, los adultos, porque de esta manera nos vais a ayudar a entender un poco mejor cómo es el Reino de Jesús.

PETICIONES

Señor te pedimos que sigas cuidando de nuestro barrio, nuestros amigos, nuestros vecinos; que la solidaridad, convivencia y el amor estén presentes en nuestro día a dia porque así es el Barrio que queremos.

Te pedimos también que no se juzgue a nuestros vecinos musulmanes por su religión ni por los acontecimientos extremistas ocurridos.

Señor te pedimos que nos guíes en nuestro camino para lograr un Reino de amor y de paz, donde no existan diferencias entre razas, ideologías y religiones. Ayúdanos a permanecer unidos para acabar con el odio y radicalismo que están azotando el mundo.

Te pedimos fuerzas para solidarizarnos con las personas de nuestro entorno que perdieron familiares de forma trágica e injusta para ayudarlos a superar esta perdida.

Te pedimos por que la Iglesia arrope y ayude a los más necesitados y para que juntos trabajemos por lo que es importante en el reino de Dios: la justicia, el amor, la alegría, la fe, la esperanza.

OFRENDAS

LIBRO DE CATEQUESIS: Los niños de catequesis te ofrecemos este libro con el que nos estamos preparando para recibirte por primera vez. Porque queremos poder participar de esta fiesta que es la Eucaristía y ser miembros activos de esta comunidad tal y como vemos que hacen nuestros padres, que cada día que se esfuerzan por crecer como cristianos.

BOTIQUIN: También queremos presentarte este botiquín. Porque en el año de la misericordia queremos ser tirita para todos los corazones enfermos y tristes.

JUGUETES: Te ofrecemos en estos juguetes la alegría con la que disfrutamos de nuestro tiempo libre, pequeños y mayores. Queremos que estés siempre presente en nuestro día a día recordándonos que tú quieres siempre que estemos alegres.

PAN Y VINO: Te ofrecemos el pan y el vino símbolo del esfuerzo diario que todos hacemos cada día, en el colegio, en el trabajo y en nuestras casas para construir un mundo mejor.

UN CORAZÓN GENEROSO

Parroquia Nuestra Señora de Lourdes. Valdefierro

Misa dominical 8 de noviembre de 2015

Monición de entrada.

Buenos días. Hoy el tema de la misa va de DAR. De dar, de compartir, pero de una manera que quizá nos cuesta entender, ya que tanto en la primera lectura y en el evangelio nos proponen dar de lo que nos hace falta, de lo que no nos sobra. Aparecen dos viudas, de las últimas en la escala social de Israel, y además pobres. Sin embargo comparten lo poco que tienen. Y hasta el mismo Jesús señala el valor de la pequeña ofrenda hecha por la viuda.

Hemos de reconocer que solemos compartir lo que nos sobra, los libros viejos en el mercadillo, la ropa que se nos ha quedado pequeña, los juguetes que ya no usamos,...y también compartimos nuestro dinero, pero de una manera que normalmente no nos afecta a nuestra economía familiar. Sinceramente: solemos compartir menos de lo que nos gastamos en vacaciones, en salir con los amigos, en tomar algún refresco… Y aun así tiene valor el hecho de que compartamos nuestros bienes. Pero Jesús nos dice hoy que está mejor cuando compartimos no solo lo que nos sobra, sino lo que nos hace falta.

También podemos intuir que cuando compartimos lo que somos, el tiempo que tenemos, lo que sabemos hacer, nuestro esfuerzo, la alegría y las penas,… nuestra vida!, pues estamos compartiendo algo más que aquello que nos sobra. Entonces, nos ofrecemos a nosotros mismos. Y eso tiene más valor. Y entonces, lo poco que entregamos de nosotros tiene mucho valor, aunque sea aparentemente insignificante. Cada uno aporta algo nuevo y distinto, siempre enriquecedor. Quizá en ese caso nos podríamos parecer a la viuda.

Vamos a celebrar la misa de hoy teniendo presente este mensaje y recalcando que lo debemos hacer siempre con alegría. Recordad nuestro lema: Estad Alegres. Compartir lo que somos, nuestra vida, no solo lo que nos sobra, nos va a hacer más alegres.

Acto penitencial.

Muchas veces entregamos lo que nos sobra y por ello nos creemos ya los benefactores de la sociedad. SEÑOR, TEN PIEDAD.

Cuantas veces pensamos que lo que podemos aportar no merece la pena o no es suficiente y dejamos de hacerlo. CRISTO, TEN PIEDAD.

Nos cuesta seguir tu propuesta: un camino de entrega y sencillez, de generosidad callada en la que compartamos lo que somos y lo que tenemos. SEÑOR, TEN PIEDAD.

Monición a las lecturas

En la primera lectura de hoy escuchamos sobre la generosidad de una viuda a la que no le queda alimento ni para mantenerse con su hijo y aún así comparte lo que tiene, empujada por las palabras del profeta. Vemos también que como resultado de su generosidad su despensa no se vacía. Al dar generosamente sin plantearse las consecuencias, recibe más.

En la carta de los hebreos, se nos recuerda que Jesús se ofreció a sí mismo, totalmente y hasta el final, señalándonos con su generosidad el camino que nos acerca a la presencia eterna de su Padre.

En el evangelio se compara la falsa generosidad, cargada de vanidad, de los que publican sus buenas obras y dan de lo que les sobra frente a la humilde y callada ofrenda de una viuda que posiblemente ofrece todo lo que le queda sin protagonismo, de manera silenciosa. Jesús nos dice claramente cuál de las maneras de compartir tiene valor para Él.

Oración de los fieles

Por los pobres y necesitados, por los que no tienen trabajo o se encuentran solos y abandonados, que sienta la cercanía y generosidad de los cristianos de Valdefierro. “Roguemos al Señor”.

Por todas las personas que entregan su vida al servicio de los demás de una manera discreta y sin echarse flores, para que Dios les dé fuerzas y alegría en su tarea. “Roguemos al Señor”.

Por todos nosotros, la comunidad de Vadefierro, para que pongamos al servicio de todos lo que somos y tenemos: el dinero, el trabajo y nuestras vidas. “Roguemos al Señor”.

Para que luchemos porque el mundo sea la casa común de todas las personas, construida desde el respeto, la justicia y la igualdad. “Roguemos al Señor”.

Trabajemos para que nuestro país y todos los países ricos, hagan suya la llamada de tantos pueblos injustamente empobrecidos y les ayuden en un desarrollo justo y solidario. “Roguemos al Señor”.

Para que seamos creadores de paz, de la paz que nace de la justicia y del reconocimiento de cada persona humana. “Roguemos al Señor”.

Ofertorio.

Hoy en el ofertorio, para interiorizar aun más la palabra de Jesús de hoy, el que quiera va a realizar una pequeña ofrenda, importante para él o ella, dando lo que le falta, lo que es más personal, lo que puede ayudar a los demás y a veces nos guardamos por miedo, por vergüenza o por comodidad. Y de una manera humilde, en silencio, sin que se entere la otra mano. Puede ser una acción, una actitud, un compromiso concreto, una característica de su personalidad…Al pasar la cesta el que quiera escribe en un trozo de papel eso que quiere ofrecer, de una manera consciente de su compromiso y de manera anónima lo echará al cesto de la ofrenda y después se ofrecerán ante toda la comunidad en el altar.