domingo, 24 de mayo de 2015

COMPARTIMOS EL ESPÍRITU DE DIOS


PENTECOSTES 2015

MONICIÓN DE ENTRADA

¡Buenos días hermanas y hermanos! Celebramos hoy la fiesta de Pentecostés. Nuestro Padre Dios y su hijo y nuestro hermano Jesucristo nos regalan su Espíritu para vivir en nosotros. Vamos a ver un vídeo que nos ayudará a entenderlo.





PERDÓN

Escuchamos la canción de Luis Guitarra “Vengo cansado”



MONICIÓN A LAS LECTURAS

Discípulo 1: -¿qué ha sido eso? ¿No habéis oído un ruido?

Discípulo 2: -¡Calla, que nos van a oír!

Narrador: Pedro, el que había traicionado a Jesús diciendo que ni siquiera lo conocía, estaba en una esquina, entristecido, al fondo del salón.

Discípulo 3: -Anda, Pedro, come un trozo de bizcocho que nos ha traído Rosa.

Pedro: -No, gracias, no tengo hambre.

Narrador: Pedro seguía pensando en sus cosas…

Pedro: -"Yo nunca te abandonaré… Aunque todos te traicionen, yo no…". Eso le dije a Jesús. El me llamaba "piedra" refiriéndose a mi fe; pero mi corazón es un pedrusco…

Narrador: Y lo mismo pensaban todos en aquella casa, cada cual a su manera.

Discípulo 1: -Tengo 17 años. Nunca conocí a nadie como él, y nunca lo conoceré.

Discípulo 2: -El me hizo sentir amada de verdad. Ayudó a crecer lo mejor que había en mí.

Discípulo 3: Nos habló de Dios como nunca nadie nos había hablado…

Pedro: Jesús ha muerto. Pero si con él ha muerto todo lo que él defendía, todo aquello por lo que él vivió, entonces esta vida es de verdad estar muertos, y no merece la pena vivir.

Narrador: ¿No merece la pena la inocencia?

¿No merece la pena la defensa de los que no pueden defenderse?

 ¿No merece la pena la dignidad de cada ser humano?

¿No merece la pena perdonar a nuestros enemigos e incluso llegar a amarles?

¿No merece la pena la misericordia?

¿No merece la pena la esperanza en un mundo mejor?…

Pedro: -Amigos míos, ¡no puedo más! ¡yo así no puedo seguir, con todo lo que hay que hacer! ¿Vamos a estar aquí encerrados como ratas?

Discípulo 1: ¡Ay, ay, ay, la debilidad se le ha subido al coco!

Pedro: -¿Es así como somos fieles al recuerdo y a la amistad de Jesús? ¿Es esto lo que queríamos decir cuando le jurábamos amistad eterna?…

Narrador: A medida que Pedro hablaba, ellos sentían como un fuego que les entraba por dentro… Sentían revivir dentro de ellos el Espíritu de Jesús, y un viento impetuoso se llevó sus miedos, arrancó sus temores, limpió sus prejuicios…




Pedro: -¡Vamos a salir ahí fuera, y si nos detienen, que nos detengan! Nosotros somos la prueba de que Jesús sigue vivo.



HOMILIA

Narrador: "Al final, pese al miedo que les había embargado, salieron a dar la cara. No salieron de su escondite para fundar una nueva Iglesia en la que ellos fueran los jefes; tampoco para obtener ningún beneficio material (¿quién les iba a premiar por dar la cara por un ajusticiado?); ni para que les considerasen héroes (¿héroes de qué, con lo cobardes que se habían demostrado…) ¿Qué fue eso del Espíritu Santo? Tuvo que ser algo tan profundo que se les metió dentro, que se apoderó de su mente y su corazón. Sintieron en sus entrañas que Jesús se había hecho querer demasiado como para que ahora ellos renegasen de él y de lo que para él había sido el objetivo total de su vida. Pentecostés fue una explosión de amor. Solo el amor es capaz de hacer cambiar así a las personas, solo el amor vence al miedo. Del amor de Jesús, de su mismo espíritu, nació la comunidad del reinado de Dios. Y fue ese amor el que les hizo salir para cambiar el mundo, para que el mundo fuera como Dios lo había soñado desde el principio. Ellos eran la prueba de que Jesús no había muerto, de que lo mejor de él seguía vivo.



¿Y nosotros?

-El hecho de que ser "cristiano" no exija hoy valentía ¿no resulta sospechoso?

- No parece que hoy en día ser cristiano implique compartir hasta el fondo la opción de vida de Jesús. ¿Por qué sucede esto?

-¿Por qué ser cristiano ya no significa ser amigo fuerte de Jesús?

- ¿A qué ha quedado reducido aquel fuego, aquella pasión?

-Seguimos prudentemente encerrados en nuestros cenáculos, ¿cuáles son nuestros miedos?

-¿Podríamos confesarnos a nosotros mismos que no podemos ¡VIVIR! alejados de Jesús?





PRECES

Repetimos todos juntos:

Espíritu Santo, que llenas de vida nuestros pasos, derrama sobre nosotros los dones que necesitamos:

Danos entusiasmo para buscar la verdad allí donde estemos.

Danos sabiduría para saber entender tus designios.

Danos fortaleza para superar las adversidades.

Danos fidelidad para acoger tus enseñanzas de vida

Danos fe para descubrir tu rostro en los más pobres.

Danos valentía para apasionarnos por tu causa.

Danos optimismo para compartirlo con los que sufren.

Danos libertad para denunciar toda injusticia

Danos generosidad para desvivirnos por los demás.

Que tú seas luz para nuestros ojos,
aliento para nuestros pulmones,
aceite para nuestras heridas,
consuelo para nuestras caídas,
premio para nuestros esfuerzos. AMÉN.




LITURGIA EUCARÍSTICA

(Que suban los niños al altar en esta última parte, en representación de toda la comunidad, como signo de que "salimos" de nuestros sitios, nos "movemos". Formamos una comunidad, es el primer paso para después salir a la calle y continuar la obra que Jesús comenzó.)



Carta del Espíritu al Mundo (Después de la comunión)

Querida humanidad y creación:

Hoy me encuentro soñando con vosotros,
con vuestro mundo bello y herido.
Sueño el día en que vuestro espíritu humano se vuelva sencillo,
que os hagáis libres, que os sintáis libres, amando y siempre      amando....

Sueño con una Tierra Nueva en la que todos os miréis a los ojos,
Os saludéis por la calle, os sepáis escuchar...

Sueño para vosotros una vida sin prisas,
viviendo cada día como si fuese el primero y el último...,
maravillándoos como niños...

Sueño con un mundo donde deis más importancia a las personas que a las cosas...

Sueño con un mundo donde sepáis amar al pobre, al que no tiene pan; al de corbata y el teléfono móvil...

Sueño con un mundo donde no haya juicios ligeros, 
sino acercamientos lentos y entrañables...

Sueño con un mundo sin relojes que os marquen vuestros destinos y acciones, porque sueño con el día en que os guiéis sólo por vuestro corazón...

Os sueño sintiéndoos hermanos, sin jerarquías de poder sino de amor...

Os sueño libres de ataduras, confiando, siempre confiando...

Os sueño dando gracias por la VIDA..., en conexión con el Alma...

Existe un camino en que sólo los sueños son capaces de transformar corazones inquietos y mantener la llama, porque los sueños tienen poder de transformar el mundo si se les cree...

Con todo ello me despido de vosotros para quedarme siempre en vosotros. 

¡No dejéis de soñar mis sueños!

                                                                                    El Espíritu de Dios



PD. Recuerda que los sueños son para la vida..., hazlos vida.


No hay comentarios:

Publicar un comentario