
Hoy, en el día de la Ascensión, Jesús, que llevaba 33 años con nosotros con los pies sobre la tierra viendo nuestras necesidades y nuestras carencias, ya nos ha entendido y nos conoce, ya ha hecho su labor entre nosotros y nos deja su doctrina, su manera de hacer las cosas. Y vuelve al Padre.
La Ascensión de Jesús no es otra cosa que lo que nos está diciendo en su Evangelio desde hace 2000 años: las cosas importantes de la vida son el amor y la buena relación con tu prójimo y contigo mismo. ¡¡Y que tenga que venir un bichito microscópico a recordárnoslo!!