EUCARISTÍA DE LA NOCHE DE NAVIDAD
PREGÓN DE NAVIDAD
¡Se hace sabeeer!
¡A la comunidad
parroquial de Valdefieeerro!
¡Que esta noche, día 25 de diciembre, un gran acontecimiento
ha ocurrido en toda la Tierra!
¡Que Dios vuelve a manifestarse en los corazones de las
personas de buena voluntad!
¡Que no hay un solo lugar en el mundo, por recóndito que sea,
donde no esté presente!
¡Que nos trae una buena noticia a la humanidad!
Y esa buena noticia es mucho más que el papel de regalo con
el que solemos envolver la Navidad: mucho más que las comidas y las cenas con
familias, amigos y compañeros de trabajo; mucho más que las luces, arbolitos y
belenes; mucho más que la lotería y los regalos; mucho más que unas vacaciones
de colegio o de trabajo.
La buena noticia nada tiene que ver con la fama, ni con la
buena posición social; ni con las marcas de ropa, ni con los juguetes de nueva
tecnología; nada tiene que ver con la fuerza ni con la violencia; ni con las
apariencias, ni con las normas que oprimen en lugar de liberar; nada tiene que
ver con las seguridades, comodidades, ni con el egoísmo. La buena noticia no
tiene nada que ver con todo aquello que esclaviza a las personas.
La buena noticia es el
Amor que Dios nos tiene a toda la humanidad. Un amor que nace entre los más
pobres, entre la gente sencilla y transparente. Un amor que proclama la
liberación de los oprimidos, que tiene preferencia por los más débiles; que
llora con los que sufren, que se entrega hasta dar la vida; que trabaja por un
mundo mejor y más justo, que acepta a cada uno tal y como es; que no impone
sino que invita, que busca la felicidad del ser humano.
La buena
noticia es un Amor esperanzado que nos invita a salir a los caminos de la vida,
haciendo posible la Navidad cada día:
Que nuestros esfuerzos
sean para que nadie se quede sin comida y vestido, que todos tengan acceso a la salud, al
trabajo, a la educación y a la cultura; Que entreguemos generosamente nuestra
vida en favor de los más necesitados. Que acojamos y respetemos a las personas
vengan de donde vengan, porque todos somos habitantes de la misma Tierra, hijos
del mismo Dios, y por lo tanto, hermanos. Que la igualdad y la justicia sean
nuestro lema como único camino para la paz. Que descartemos cualquier tipo
de violencia como solución a los
conflictos y busquemos caminos de dialogo. Que no nos dejemos vencer por el
miedo y la comodidad. Que allá donde estemos: con la familia, con los amigos,
en el trabajo, en la sociedad… seamos sembradores de paz y procuremos siempre
la felicidad del otro. Que nuestra vida sea reflejo de Dios Amor. Ésta es la
Buena Noticia. Esta es la Navidad.
¡Feliz Navidad a todos!
PERDÓN
En mi debilidad (canto)
Es en nuestra debilidad donde se hace más fuerte el amor de
Dios. Él se conmueve ante nuestras limitaciones y miserias, ante nuestra
pequeñez. Dios se hizo hombre para
acercarse a nosotros, para tomar nuestra pequeña vida y transformarla en VIDA
con mayúsculas. Que la misericordia y el Amor de Dios sean para nosotros una
oportunidad de crecer y hacernos fuertes en Él.
PAZ
A nadie le gusta el sufrimiento. El mayor sufrimiento que
existe no es el de la enfermedad, ni siquiera el causado por la pérdida de un
ser querido. Lo que más hace sufrir a la humanidad es la violencia. Cualquier
tipo de violencia, ya sea física, opresión, humillación… anula la dignidad de
la persona y la hace desgraciada. No es necesario irnos muy lejos para
comprobar que las situaciones violentas son algo cotidiano y que tristemente,
nos hemos acostumbrado a muchas de ellas. Si pensamos un poco, nosotros mismos
somos cada día causantes de violencia: en nuestra familia, en el trabajo, con
aquellos que no piensan y sienten como desearíamos… A través de gritos, malas
contestaciones, queriendo imponer siempre nuestra voluntad, no aceptando a los
demás como son, insultando, peleando por cualquier tontería en lugar de
dialogar desde el cariño y el respeto… Todas las muestras de violencia son una
falta de amor. Esta Navidad, y para todos los días, queremos hacer una
propuesta de no violencia entre nosotros. Un mundo mejor es posible, y esa
transformación del mundo ocurrirá cuando yo sea capaz de cambiar mi vida y
vivirla desde la paz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario