Ya teneis disponible en la sección "Versión impresa" y aquí el número 24 de nuestra revista El Porche. Para ir abriendo boca, aquí teneis el editorial que, como es habitual, escribe nuestro amigo Jose Pedro Tosaus:
" EL MUNDO TE NECESITA"
El título del presente número de El Porche trae a la memoria aquel texto evangélico en el que Jesús les dice a sus discípulos: "Vosotros sois la luz del mundo... Vosotros sois la sal de la tierra...". Estas palabras no son un motivo de orgullo para los cristianos: se trata de realizar dos servicios humildes, aunque importantes.
La luz ha de alumbrar la casa entera. No hace falta que sea una luz grande. Basta un pequeño candil: ante él, la tiniebla cede para permitir que todos puedan hacer sus labores.
La sal ha de mezclarse, disolverse unida a los alimentos que transforma.
¿Y si el candil se negara a quemar su aceite para que la gente pueda hacer sus cosas? ¿Y si la sal se negara a deshacerse, a desaparecer en su modesto acto de servicio? Absurdo, ¿verdad?
Igual de absurdos somos nosotros (nos dice Jesús) cuando nos empeñamos en no darnos al mundo, que necesita nuestro minúsculo grano de sal, nuestro humilde rayo de luz.
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